El Partido Comunista de Filipinas (CPP) ha condenado la «descarada traición a la independencia del pueblo filipino y a la soberanía del país» del régimen de Marcos por «confabularse con el gobierno y el ejército de EE.UU. para el traslado secreto del sistema de misiles Typhon de EE.UU. a un lugar no revelado del país», en una declaración del pasado 24 de enero de 2025.

"El despliegue del sistema (de misiles) estadounidense Typhon en Filipinas es una provocación temeraria contra el rival imperialista estadounidense, China. Con ello, EE.UU. está utilizando el país como trampolín para su proyección militar y la expansión de su poder hegemónico. Es un peligro para la paz y la seguridad del pueblo filipino, así como de otros pueblos de la región", subrayó el CPP.

Añadió que el Partido y el pueblo filipino condenan a Marcos y a las AFP por seguir los dictados de Estados Unidos al declarar planes para adquirir un sistema de misiles Typhon que cuesta miles de millones de pesos.

En informes anteriores, el régimen de Marcos y sus altos mandos de las Fuerzas Armadas anunciaron el pasado 23 de diciembre la compra del sistema de misiles Typhon, que al parecer cuesta unos 500 millones de dólares estadounidenses (unos 29.000 millones de pesos filipinos), una cantidad más que suficiente para construir más escuelas públicas y viviendas, y subvenciones agrícolas para los campesinos, especialmente para los que han quedado en la miseria como consecuencia de los recientes desastres naturales.

El sistema de misiles Typhon Mid-range Capability (MRC) tiene capacidad para lanzar misiles Tomahawk y SM-6 que pueden volar hasta 1.600 kilómetros. EE.UU. comenzó a fabricar este tipo de armas en 2019, que anteriormente estaban prohibidas en virtud del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF), un tratado nuclear entre EE.UU. y la entonces URSS firmado durante la Guerra Fría. Estados Unidos se retiró de este tratado en 2019.

«El régimen de Marcos debe ser condenado por actuar como un títere estadounidense al permitir que el ejército de Estados Unidos deposite y almacene sus armas en el país, poniendo a Filipinas en riesgo de ser arrastrada a una guerra interimperialista que solo sirve a los intereses del imperialismo estadounidense».

El Partido reitera la exigencia del pueblo filipino de que el sistema de misiles Typhon de EE.UU. sea retirado inmediatamente del país, ya que es un imán para el ataque de los rivales imperialistas de EE.UU., entre ellos China y Rusia", dijo el CPP.

Los grupos progresistas han subrayado que permitir tropas y armas estadounidenses en Filipinas atenta contra la política exterior independiente del país y que la constitución del GRP prohíbe las armas nucleares en territorio filipino.

Los misiles Typhon fueron traídos al país y utilizados en la mayor serie de juegos de guerra Balikatan a principios de 2024. Inicialmente ocultos, los misiles Typhon han sido posicionados en el aeropuerto civil de Laoag en Ilocos Norte, una región no declarada como base militar estadounidense o «sitio EDCA», y provincia natal de Bongbong Marcos.

Recientemente, Marcos se marcó el farol de que «devolvería» los misiles Typhon a EEUU si China abandonaba el Mar de Filipinas Occidental. Los críticos han dicho que nadie se traga el farol de Marcos, ya que, de hecho, son los EE.UU. quienes dominan las fuerzas armadas de Marcos y dictan dónde y cuándo posicionar sus fuerzas y armas.

Según los informes, el ejército filipino ha anunciado que algunos de sus pelotones recibirán formación sobre el uso del sistema Typhon en febrero de este año, antes de otra ronda de ejercicios conjuntos con tropas estadounidenses.